"El evangelio de Judas" (Apócrifo)


Traducido al ingles por Rodolphe Kasser, Marvin Meyer, y
Gregor Wurst, en colaboración con François Gaudard.
Traducción al español de Fabio Guevara.
INTRODUCCIÓN: PRINCIPIO
El relato secreto de la revelación que Jesús habló en la conversación con
Judas Iscariote durante una semana tres días antes de que celebrara la Pascua.
EL MINISTERIO TERRENAL DE JESÚS
Cuando Jesús apareció en la tierra, realizó milagros y grandes
maravillas para la salvación de  la humanidad. Y siendo que algunos
[caminaron] el camino de la justicia mientras otros caminaron en sus
transgresiones, los doce discípulos fueron llamados.
Él empezó a hablar con ellos sobre los misterios más allá del mundo y
de lo sucedería al final. Frecuentemente no aparecía a sus discípulos como él
mismo, sino que se le encontraba entre ellos como un niño.
ESCENA 1:  Diálogos de Jesús con sus  discípulos: La oración de
acción de gracias o la eucaristía
Un día se encontraba con sus discípulos en Judea, y les encontró
reunidos y sentados en piadosa ceremonia. Cuando él [se acercó] a sus
discípulos, [34] reunidos y sentados  y ofreciendo una oración de acción de
gracias sobre el pan, [se] rió.
Los discípulos [le] dijeron, “Maestro, ¿por qué re ríes de [nuestra]
oración de acción de gracias?. Hemos hecho lo correcto.
Él respondió y les dijo, “No me estoy riendo de ustedes. [Ustedes] no
hacen esto por su propia voluntad, sino porque es a través de esto que su dios
[será] alabado”.
Ellos dijeron, “Maestro, tú eres [...] el hijo de nuestro dios”. Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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Jesús les dijo, “¿Cómo es que me  conocen?. En verdad [les] digo,
ninguna generación de aquellos que están entre ustedes me conocerá”.
LOS DISCÍPULOS SE MOLESTARON
Cuando sus discípulos escucharon esto, se empezaron a molestar y a
enfurecerse y empezaron a blasfemar contra él en sus corazones.
Cuando Jesús observó su falta de [comprensión] les [dijo], “¿por qué
esta agitación les lleva al enojo?. Su dios que está dentro de ustedes y [...] [35]
los ha provocado para encolerizarse [dentro] de sus almas. [Dejad] a
cualquiera de ustedes que sea [suficientemente fuerte] entre los seres humanos
sacar al humano perfecto y pararse ante a mi rostro”.
Todos dijeron, “Tenemos la fuerza”.
Pero sus espíritus no se atrevieron a ponerse frente a [él], excepto Judas
Iscariote. El fue capaz de parase frente a él, pero no le pudo mirar a los ojos, y
volvió su cara a otro lado.
Judas le [dijo], “Sé quien eres y de dónde vienes. Tú eres del reino
inmortal de Barbeló. Y no soy digno de pronunciar el nombre de quien te ha
enviado”.
JESÚS HABLA CON JUDAS EN PRIVADO
Sabiendo que las reflexiones de Judas eran sobre algo muy exaltado,
Jesús le dijo, “Apártate de los demás y te diré los misterios del reino. Para ti es
posible alcanzarlo, pero padecerás gran aflicción. [36] Pues alguien más te
reemplazará, de manera que los doce [discípulos] puedan de nuevo
completarse con su dios”.
Judas le dijo, “¿Cuándo me dirás estas cosas, y [cuándo] llegará el día
de la gran luz para la generación?.
Pero cuando dijo esto, Jesús le dejó.
ESCENA 2: Jesús aparece de nuevo a los discípulos
La mañana siguiente, después de que esto sucediera, Jesús [aparece] de
nuevo a sus discípulos.
Ellos le dijeron, “¿Maestro, dónde fuiste y qué hiciste cuando nos
dejaste?”.
Jesús les dijo, “Fui a otra grande y santa generación”. Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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Sus discípulos le dijeron, “Señor,  ¿cuál es la gran generación que es
superior a nosotros y más  santa que nosotros, que no está ahora en estos
reinos?”.
Cuando Jesús escuchó esto, se rió y les dijo, “¿Por qué están pensando
en sus corazones sobre la fuerte y santa generación? [37] En verdad [les] digo,
nadie nacido [de] este aeón verá esa [generación], y ningún coro de ángeles de
las estrellas regirá sobre esta generación, y ninguna persona de nacimiento
mortal puede asociarse con ella, porque esa generación no viene de [...] que se
ha vuelto [...]. La generación de personas entre [ustedes] es de la generación
de la humanidad [...] poder, el cual [... los] otros poderes [...] por [los cuales]
ustedes gobiernan”.
Cuando [sus] discípulos escucharon esto, fueron perturbados en espíritu.
No pudieron decir una palabra.
Otro día Jesús vino a [ellos]. Ellos [le] dijeron, “Maestro, te hemos visto
en una [visión], pues hemos tenido grandes [sueños ...] noche [...]”.
[Él dijo], ¿Por qué se [ustedes ... cuando] se han ido a esconder?” [38].
LOS DISCÍPULOS VEN EL TEMPLO Y LO COMENTAN
Ellos [dijeron, “Hemos visto] una gran [casa con un gran] altar [en ella,
y] doce hombres ― diríamos que son los sacerdotes ― y un nombre; y una
multitud esperando en aquel altar, [hasta] que los sacerdotes [... y reciban] las
ofrendas. [Pero] permanecimos esperando.
[Jesús dijo], “¿Cómo eran [los sacerdotes]?.
Ellos [dijeron, “Algunos ...] dos semanas; [algunos] sacrifican a sus
propios hijos, otros a sus esposas, en alabanza [y] humildad mutua; algunos
duermen con hombres; algunos están  envueltos en [matanzas]; algunos
cometen multitud de pecados y actos ilícitos. Y los hombres que están [ante]
el altar invocan tu [nombre], [39] y en todos los actos de su carencia, se hacen
sacrificios para completarla [...]”.
Después de decir esto, callaron, pues estaban perturbados.
JESÚS OFRECE UNA INTERPRETACIÓN ALEGÓRICA DE LA VISIÓN
DEL TEMPLO
Jesús les dijo, “¿Por qué estáis perturbados?. En verdad os digo, todos
los sacerdotes que están ante el altar invocan mi nombre. De nuevo les digo,
mi nombre ha sido escrito en esta [...] de las generaciones de las estrellas a Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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través de las generaciones humanas. [Y ellos] han plantado árboles sin fruto,
en mi nombre, de manera vergonzosa”.
Jesús les dijo, “Aquellos a quienes han visto recibiendo las ofrendas en
el altar ― eso es lo que ustedes son. Ese es el dios al que sirven, y ustedes son
esos doce hombres que han visto. Los animales que han visto para el sacrificio
son las personas que ustedes han extraviado [40] ante el altar. [...] se
levantarán y utilizarán mi nombre de esta manera, y generaciones de devotos
permanecerán leales a él. Después de  él otro hombre se colocará desde [los
fornicarios], y otro [se] colocará desde  los asesinos de niños, y otro desde
aquellos que duermen con hombres, y aquellos que se abstienen, y el resto de
las personas de contaminación y desobediencia y error, y aquellos que dicen,
“Somos como ángeles”, ellos son las estrellas que traerán todo a su
terminación. Pues para las generaciones humanas, se ha dicho, “Mira, Dios ha
recibido tu sacrificio de las manos de un sacerdote” ― esto es, un ministro del
error. Pero es el Señor, el Señor del universo, quien manda, “En el día último
ellos serán avergonzados”. [41]
Jesús [les] dijo, “Dejad de [sacrificar...] lo que tenéis [...] sobre el altar,
pues ellos están sobre tus estrellas y  tus ángeles y ya  han llegado a su
terminación allí.
Así que dejadles que sean [seducidos] ante ustedes, y dejadlos ir [cerca
de 15 líneas perdidas] generaciones [...]. Un panadero no puede alimentar a
toda la creación [42] bajo el [cielo]. Y [...] para ellos [...] y [...] para nosotros y
[...].
Jesús les dijo, “Dejad de luchar conmigo. Cada uno de ustedes tiene su
propia estrella, y cada [uno ― cerca de 17 líneas perdidas ― ] [43] en [...]
quien ha venido [... proceder] por el árbol [...] de este aeón [...] por un tiempo
[...] pero él ha venido a regar el paraíso de Dios, y la [generación] que
perdurará, porque [él] no mancillará el [camino de la vida de] esa generación,
sino [...] por toda la eternidad”.
JUDAS  PREGUNTA A  JESÚS  SOBRE ESA  GENERACIÓN Y LAS
GENERACIONES HUMANAS
Judas [le] dijo, [Rabb]i, ¿qué tipo de fruto produce esta generación?.
Jesús dijo, “Las almas de cada  generación humana morirán. Cuando
estas personas, sin embargo, hayan completado el tiempo del reino y el
espíritu les deje, sus cuerpos morirán  pero sus almas estarán vivas, y serán
exaltadas”. Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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Judas dijo, “¿Y qué harán el resto de las generaciones humanas?”.
Jesús dijo, “Es imposible [44] sembrar semilla en la [roca] y cosechar su
fruto. [Esta] es también la forma [...] la generación [mancillada] [...] y la
corruptible Sophia [...] la mano que ha creado a los mortales, para que sus
almas asciendan a los reinos eternos arriba. [En verdad] te digo, [...] ángel [...]
poder podrá ver que [...] éstos a quien [...] santas generaciones [...]”.
Después de que Jesús dijera esto, partió.
ESCENA 3: Judas relata una visión y Jesús responde
Judas dijo, “Maestro, así como les has escuchado a todos, ahora
escúchame a mí. Pues he tenido una gran visión”.
Cuando Jesús escuchó esto, se rió y le dijo, “Tú, decimotercer espíritu,
¿por qué lo intentas tanto?. Pero habla, y yo lo llevaré contigo”.
Judas le dijo, “En la visión vi como los doce discípulos me apedreaban
[45] y me perseguían [severamente].  Y también vine al  lugar donde [...]
después de ti. Vi [una casa...], y mis ojos no pudieron [comprender] su
tamaño. Grandes personas la rodeaban, y aquella casa ― tenía ― un techo de
verdor, y en medio de la casa estaba [una multitud ― dos líneas perdidas ― ],
diciendo, “Maestro, albérgame junto con estas personas”.
[Jesús] respondió y dijo, “Judas, tu estrella te ha extraviado”. Y
continuó, “Ningún mortal es digno de entrar en la casa que has visto, pues ese
lugar está reservado para los santos. Ni el sol ni la luna regirá ahí, ni el día,
pero el santo morará ahí siempre, en  el reino eterno con los ángeles santos.
Mira, te he explicado los misterios del reino [46], y te he enseñado sobre el
error de las estrellas; y [...] lo envié [...] en los doce aeones”.
JUDAS PREGUNTA SOBRE SU PROPIO DESTINO
Judas dijo, “Maestro, ¿podría ser que mi semilla esté bajo el control de
los regidores?”.
Jesús respondió y le dijo, “Ven, que yo [ ― dos líneas perdidas ― ],
pero te afligirás mucho cuando veas el reino y toda su generación”.
Cuando escuchó esto, Judas le dijo, “¿qué bien es ese que yo he
recibido? Para que me hayas puesto aparte de esa generación”.
Jesús respondió y le dijo, “Tú te convertirás en el decimotercero, y serás
maldecido por las otras generaciones ― y vendrás a regir sobre ellos. En los
últimos días ellos maldecirán tu ascensión [47] a la santa [generación]”. Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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JESÚS ENSEÑA A JUDAS SOBRE COSMOLOGÍA: EL ESPÍRITU Y EL
AUTO-GENERADO
Jesús dijo, “[Ven], para que pueda enseñarte sobre [secretos] que
ninguna persona [ha] visto jamás. Pues existe un grande e ilimitado reino,
cuya magnitud ninguna generación de ángeles ha visto, [en la cual] hay [un]
grande e invisible [Espíritu],
que ojo de ángel nunca ha visto jamás,
ningún pensamiento del corazón jamás ha comprendido,
y nunca ha sido llamado por ningún nombre.
“Y una nube luminosa apareció. Él  dijo, “Dejad a un ángel aparecer
como mi servidor”.
“Un gran ángel, el divino iluminado Auto-Generado, emergió de la
nube. Por él, otros cuatro ángeles  aparecieron desde otra nube, y se
convirtieron en servidores del angélico Auto-Generado. El Auto-Generado
dijo, [48] “Dejad [...] que aparezca [...],” y apareció [...]. Y [creó] la primera
lumbrera para reinar sobre él. Dijo, “Dejad que aparezcan los ángeles para [su]
servicio,” e incontables miríadas aparecieron. Dijo, “[Dejad] que aparezca un
aeón iluminado”, y entonces apareció. Creó a la segunda lumbrera [para] que
reinara sobre él, junto con las incontables miríadas de ángeles, para servir. De
esta forma creó el resto de los aeones iluminados. Les hizo reinar sobre ellos,
y por ellos creó incontables miríadas de ángeles, para que les asistieran.
ADAMAS Y LAS LUMBRERAS
Adamas estaba en la primera nube luminosa que ningún ángel había
visto jamás entre aquellos llamados “Dios”. El [49] [...] que [...] la imagen [...]
y a semejanza de [este] ángel. Hizo aparecer a la incorruptible [generación] de
Seth [...] los doce [...] los veinticuatro [...]. Hizo aparecer setenta y dos
luminarias en la generación incorruptible, de acuerdo con la voluntad del
Espíritu. Estas setenta y dos luminarias hicieron aparecer trescientos sesenta
luminarias en la generación incorruptible, de acuerdo con la voluntad del
Espíritu, de que su número debía ser cinco por cada uno.
“Los doce aeones de las doce luminarias constituyen su padre, con seis
cielos por cada aeón, de  tal manera que hay setenta y dos cielos para las
setenta y dos luminarias, y para cada una [50] [de ellas cinco] firmamentos, Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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[para un total de] trescientos sesenta  [firmamentos]. A ellos se les dio
autoridad y un [gran] coro de ángeles [incontables], para gloria y adoración, [y
después de ello también] espíritus vírgenes, para gloria y [adoración] de todos
los aeones y los cielos y sus firmamentos.
EL COSMOS, EL CAOS Y EL MUNDO INFERIOR
“La multitud de aquellos inmortales es llamada el cosmos ― esto es,
perdición ― por el Padre y las setenta y dos luminarias que están con el AutoGenerado y sus setenta y dos aeones. En él el primer humano apareció con sus
poderes incorruptibles. Y el aeón que apareció con su generación, el aeón en el
cual están la nube de conocimiento y el ángel, es llamada [51] El. [...] aeón
[...] después de esto [...] dijo, “Dejad que aparezcan doce ángeles [para] regir
sobre el caos y sobre el [mundo inferior].”  Y mirad, de aquella nube aparece
un [ángel] cuyo rostro brilla con el fuego y cuya apariencia fue mancillada con
sangre. Su nombre fue Nebro, que quiere decir “rebelde”; otros lo llaman
Yaldabaoth. Otro ángel, Saklas, también vino de la nube. Así Nebro creó seis
ángeles ― al igual que Saklas ― para ser asistentes, y esto produjo doce
ángeles en los cielos, con cada uno recibiendo una porción de los cielos.
LOS REGIDORES Y ÁNGELES
“Los doce regidores hablaron con los doce ángeles: “Dejad a cada uno
[52] [...] y dejadlos [...] generación [ ― una línea perdida ― ] ángeles”:
El primero es [S]eth, quien es llamado Cristo.
El [segundo] es Harmathoth, quien es [...].
El [tercero] es Galila.
El cuarto es Yobel.
El quinto [es] Adonaios.
Estos son los cinco que gobiernan sobre el mundo inferior, y antes que
nada sobre el caos.
LA CREACIÓN DE LA HUMANIDAD
“Entonces Saklas dijo a sus ángeles, “Hagamos a un ser humano a
semejanza e imagen”. Ellos formaron a Adán y a su esposa Eva, quien, en la
nube, es llamada Zoe. Pues por su nombre todas las generaciones buscan al Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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hombre, y cada uno de ellos llama a la mujer por estos nombres. Ahora, Sakla
no [53] or[denó...] excepto [...] las gene[raciones...] esto [...]. Y el [regidor]
dijo a Adán, “Vivirás por mucho tiempo, con tus hijos”.
JUDAS  PREGUNTA  SOBRE EL  DESTINO DE  ADAM Y DE LA
HUMANIDAD
Judas dijo a Jesús, “[¿Cuál] es la duración del tiempo que los seres
humanos vivirán?”.
Jesús dijo, “¿Por qué te cuestionas esto, que Adán, con su generación,
haya vivido su lapso de vida en el  lugar donde ha recibido su reino, con
longevidad con su gobernante?”.
Judas dijo a Jesús, “¿Muere el espíritu humano?”.
Jesús dijo, “Por esto es que Dios ordenó a Miguel darles los espíritus de
la gente a ellos a préstamo, para que  ellos puedan ofrecer servicio, pero el
Grande le ordenó a Gabriel conceder espíritus a la gran generación sin ningún
regidor sobre ellos ― esto es, el espíritu y el alma. Por consiguiente, el [resto]
de las almas [54] [ ― una línea perdida ― ].
JESÚS COMENTA LA DESTRUCCIÓN DE LO PERVERSO CON JUDAS
Y OTROS
“[...] luz [-cerca de dos líneas perdidas-] alrededor [...] permitid [...]
espíritu [que está] dentro de ustedes more en esta  [carne] entre las
generaciones de ángeles. Pero Dios provocó que el conocimiento fuera [dado]
a Adán y a aquellos con él, para que los reyes del caos y del mundo inferior no
se señorearan sobre ellos”.
Judas dijo a Jesús, “Entonces, ¿qué harán esas generaciones?”.
Jesús dijo, “En verdad te digo, para todos ellos las estrellas traerán
asuntos para su terminación. Cuando Saklas complete el lapso de tiempo
asignado a él, su primera estrella aparecerá con las generaciones, y ellos
terminarán lo que dijeron que harían.  Entonces fornicarán en mi nombre y
matarán a sus hijos [55] y ellos [...] y [cerca de seis líneas y media perdidas-]
mi nombre, y él [...] tu estrella sobre el [trece]avo aeón”.
Después de esto Jesús [rió].
[Judas dijo], “Maestro, [¿por qué te ríes de nosotros]?”. Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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[Jesús] respondió [y dijo], “No me río de ustedes, sino del error de las
estrellas, porque estas seis estrellas  vagan con estos cinco combatientes, y
todos ellos serán destruidos junto con sus criaturas”.
JESÚS  HABLA DE  AQUELLOS QUE  ESTÁN  BAUTIZADOS, Y DE LA
TRAICIÓN DE JUDAS
Judas dijo a Jesús, “Mira, ¿qué hacen aquellos que han sido bautizados
en tu nombre?.
Jesús dijo, “En verdad [te] digo, este bautismo [56] [...] mi nombre [ ―
cerca de nueve líneas perdidas ― ] para mi. En verdad [yo] te digo, Judas,
[aquellos que] ofrecen sacrificio a Saklas [...] Dios [ ― tres líneas perdidas ―
] todo lo que es malo.
“Pero tu sobrepasarás a todos ellos. Pues tú sacrificarás al hombre que
me reviste.
Ya tu cuerno se ha levantado,
tu ira se ha enardecido,
tu estrella ha brillado,
y tu corazón ha [...]. [57]
En verdad [...] tu ultima [...] se hizo [ ― cerca de dos líneas y media
perdidas ― ], aflicción [ ― cerca de dos líneas perdidas ― ] el regidor, pues
será destruido. Y entonces la imagen  de la gran generación de Adán será
exaltada, pues antes que los cielos, la tierra y los ángeles, esa generación, que
es de los reinos eternos, existía. Mira, se te ha dicho todo. Levanta tus ojos y
mira a la nube y a la luz dentro de ella y a las estrellas que la rodean. La
estrella que guía el camino es tu estrella”.
Judas levantó sus ojos y miró la  nube luminosa, y entró en ella.
Aquellos que estaban en el suelo escucharon una voz que provenía de la nube,
diciendo, [58] [...] la gran generación [...]... imagen [...] [ ― cerca de cinco
líneas perdidas ― ].
CONCLUSIÓN: JUDAS TRAICIONA A JESÚS
[...] Sus supremos sacerdotes murmuraron porque [él] había entrado en
el cuarto de huéspedes para orar. Pero algunos escribas estaban ahí vigilando Evangelio Apócrifo – El Evangelio Según Judas
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cuidadosamente para arrestarlo durante la oración, pues tenían miedo de las
gentes, pues todos le consideraban como un profeta.
Se acercaron a Judas y le dijeron, “¿Qué haces aquí?. Tu eres discípulo
de Jesús”.
Judas les respondió como deseaban. Y recibió un dinero y lo entregó a
ellos.
EL EVANGELIO DE JUDAS